La semana pasada la Sección sindical UGT VIPS tuvo el privilegio de participar en dos
cursos de formación en la Escuela Julián Basteiro. Uno de los cursos “Desarrollo de
habilidades” fue muy gratificante. Lleno de enseñanzas y tácticas que dejaron los corazones
lleno de semillas del conocimiento que, con el tiempo, se pondrá en práctica. El otro curso,
“RRHH” enseña cómo poner en práctica el trabajo sindical de cara a las negociaciones o
reuniones que mantienen los representantes de los trabajadores de forma continua con los
RRHH de nuestra empresa; en la labor diaria e incansable de beneficiar al trabajador.
En fin, más que hablarles del contenido de cada curso, quisiera ir más allá. Intentar con
estas palabras animarles a conocer a Julián Basteiro, su escuela.
Fue la primera escuela sindical después de conquistar la democracia en España. Abrió sus
puertas en 1988 con actividades y programas de formación. Destaca la excelente formación
de sus docentes, la infraestructura -tan bien cuidada- del edificio. No sólo sus muros y sus
columnas, sino lo que transmiten sus pasillos.
Numerosas fotos encuadraras con las caras de los que fueron y son ganadores del Premio
Julián Basteiro de las Artes y las Letras, entre ellos, podemos ver el recién galardonado
Iñaki Gabilondo o lciar Bollaín. Sus rincones llenos de historia, escritos de una guerra y un
triunfo que jamás se olvidará. Sus jardines -¡tan bien cuidados!- desprenden energía y
agradecimiento a la sabiduría que anima a cuidar del medio ambiente.
La educación no reconoce recortes
Gran parte de estos cursos de formación profesional tienen el objetivo de formar a los
sindicalistas. Es positivo que los representantes de los trabajadores accedan a este tipo de
formación, de modo que, estén preparados para la realidad con la que conviven. El día a día
del sindicalista. El día a día de Inés, de Rafael, de Carmen, entre otros, es representar y
defender efectivamente los derechos de los trabajadores. Y, está claro, que cuanta más
formación sindical, mejor será el desarrollo de sus actividades.
En mi humilde opinión, como autora de este artículo, intentaré expresar mediante palabras
lo que mis ojos vieron. Vi a personas, hombres y mujeres con ganas de aprender; tan
palpable como los muros de la escuela. La sincera preocupación que sienten por representar
a los trabajadores -¡no es una simple preocupación!- Las ansias por devorar conocimiento,
ponerlo en práctica y hacerlo de forma ejemplar . Ví un sentimiento. Una Vocación. Ganas
de “comerse el mundo” y luchar en favor de los derechos fundamentales. Me hubiese gustado
que tantos viesen lo que mis ojos vieron.
De esta forma rechazo cualquier tijera que quiera cortar las alas a este halcón del
conocimiento, de esta escuela, de la “Basteiro”; la primera escuela sindical.
La Sección Sindical de UGT VIPS adquirió conocimiento. Y, entre risas y café les dejamos
algunas fotos que marcaron esta semana de enero. Una excelente forma de empezar el 2014.
Mariana Espinel Aguirre
Sección Sindical UGT-VIPS
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